Andinia también es - en realidad - una simple síntesis de todo lo que fuimos coleccionando en los
viajes. El material es tal que actualmente todavía estamos procesando información que en estos días está siendo publicada, pero que recolectamos hace más de diez años.
Lo que hacemos, las cosas que pueden incluso parecer exageradas como , pero que son bien reales, no las hacemos ni para impresionar a nadie ni para pasarnos de temerarios, sino porque de esta forma podemos llegar a algunos sitios que son de interés. De hecho, en materia de paseos arborícolas, puedo decir que mi experiencia en la materia empezó en 1984, cuando hice tal cosa por primera vez, y creo que ésta es la primera vez que contamos acerca de tal técnica fuera del ámbito del Gea.
Convertirse en un explorador es asumir una cierta actitud: no hacemos esto ni por dinero, ni fama, ni para jactarnos de estar haciendo algo extremo. Simplemente
vamos a ver que hay ahí arriba... (o abajo, por supuesto), y recolectamos información. Para nosotros la exploración en sí misma es también parte de la ciencia.
Ciertamente que el hacer estas cosas le cambian la actitud a uno frente a muchas cosas; pro ejemplo, en lo personal - aunque respeto las preferencias de cad auno - me parece un poco patético ver a gente que intenta soñar o parecerse con cosas que no son, y no porque no podrían lograrlo, sino porque no están dispuestos a hacer el esfuerzo por lograrlo. Y me refiero en este caso particular a aquellos que para tener una semblanza de
aventura tienen que comprarse una camioneta todo terreno de decenas de miles de pesos, euros o dólares, y cuya máxima
aventura será cargar las cosas que se compran en el supermercado.
Y nosotros podemos pasar un mes completo en una expedición de verdad, con transporte, alimentos, provisiones, alojamiento en nuestras propias construcciones (cabañas, cuevas, grietas en el hielo, etc.) por menos de cien dólares por persona... y no es mentira.
Por eso, lo que intentamos hacer es no simplemente tratar de ganar gente para el grupo; en realidad, eso nos interesa solamente en la medida de conseguir suficientes personas como para mantener el mínimo número indispensable que hace falta para estos
viajes. Nunca nos interesó ni el
gran éxito ni la fama respecto de estas cosas y por ello nunca hemos buscado sobre-expandir nuestro grupo. Lo que queremos es que la gente vea que personas comunes pueden perfectamente hacer estas cosas.
Con tomar de lo que contamos lo que les parezca útil y ponerlo en la práctica, nos damos por satsifechos porque entonces el beneficio de lo que hacemos empieza a exceder a nuestras propias personas y eso quiere decir que entonces estamos haciendo algo bueno.
Por supuesto que con nuestro sitio, Andinia.com, obtenemos algún rédito y alguna ganancia, pero cualquier integrante del Gea puede asegurar con toda certeza que es solamente la punta del iceberg si se compara con lo que vemos y hacemos.
O sea, quien quiere ingresar al Gea tiene que ser o convertirse en una persona persistente, discreta y con mucha paciencia, porque explorar tan solamente un punto en el mapa puede llevar años incluso antes de que hasta los parientes y familiares sepan lo que uno está haciendo.